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miércoles, 3 de noviembre de 2021

Lección 3, Tercer Grado, Primera Orden

  "Las Bodas Químicas 3"


-Primera Jornada III-


Existe la idea generalizada de que realizar mágia es algo inocuo y que solo producirá satisfacciones y bienes; pero en la Vida todo se paga, si no es en el momento y en metálico se hará en diferido o a plazos. La Naturaleza nunca da duros a pesetas y la Suerte no dura para siempre.


La Magia es una realidad, que no le quepa duda a nadie; pero su uso y abuso siempre es peligroso y las consecuencias imprevisibles, no solo para el Mago sino también para toda la Humanidad e incluso para todo el Universo. En éste Mundo todo se paga, nada sale gratis y es por ello que cuando un Mago Rosacruz utiliza su Magia, lo hace conociendo los peligros que ello supone para él principalmente. Realizar mágia es siempre un sacrificio del Mago en beneficio de la Humanidad, atrayendo hacia sí la totalidad de los naturales perjuicios por haber manipulado a los arcontes y a sus fuerzas naturales. El Mundo se encuentra en un desequilibrio caótico por el uso constante, permanente y sin sentido de la Magia. Eso es un hecho que todos ustedes deben de conocer, pues es muy placentero ver cómo, a corto plazo, se cumplen nuestros deseos; pero, con el tiempo, a medio plazo, lo conseguido se esfuma volviéndose cenizas y, a largo plazo, arrastrándonos al infierno de la rueda de las existencias. Ten cuidado con lo que deseas porque tu Pensamiento es el origen de la Magia y ya sabes, quien ríe el último ríe mejor. Sé prudente, usa la inteligencia y nunca, jamás menosprecies, las consecuencias adversas de haber realizado un hechizo.


Continuemos comentando, pacientemente, nuestras Bodas Químicas:


"No sabiendo cómo actuar ante lo acaecido, me postré de rodillas y pedí al Creador que me protegiera de aquello que pusiera en peligro mi salvación eterna. Entonces, temblando de miedo, cogí la carta, que resultó ser tan pesada que parecía de oro macizo. La examiné con sumo cuidado y descubrí un sello minúsculo que la cerraba, donde podía leerse la frase: "in hoc signo vinces".


La visión de éste lema me reconfortó, pues me di cuenta que no podía ser obra del maligno. Así que abrí la carta rápidamente y leí los siguientes versos escritos en letras de oro en un campo de azur:


Hoy, hoy, hoy/ son las bodas del Rey./ Si es tu destino participar en ellas/ y has sido elegido por Dios para la alegría,/ dirígete a la montaña/ donde se encuentran tres templos/ a presenciar lo que acontezca./ Ten cuidado contigo,/ examínate a tí mismo,/ pues, si no te has purificado adecuadamente,/ estás bodas te producirán dolor./ Desdicha para quien se retrasa allí abajo./ Que se abstenga quien tenga demasiada prisa.//


Al pie se veían las firmas: Sponsus y Sponsa, (mediante el Símbolo de la Mónada Jeroglífica de Jhon Dee)


Después de leer la carta, a punto estuve de desmayarme; se me erizó el cabello y un sudor frío bañó todo mi cuerpo, pues comprendí que se trataba de las bodas que me habían sido anunciadas siete años atrás, en una visión. Las había esperado con ansia y deseado con ardor, y había calculado la fecha de su celebración estudiando mis aspectos planetarios, pero jamás sospeché que se celebrarían en condiciones tan graves y extremas." 


Nos vuelve a recordar, por el miedo de nuestro Protagonista, Christian Rosentkreutz, que acaba de pasar por una terrible experiencia al confrontar a su femenino Guardián del Umbral. Al tomar el sobre nota dos cosas muy interesantes, el peso inusual de su contenido así como su diminuto sello. La Carta es la representación de toda la vida del yo, con sus terribles cargas y que son la causa, en general, de que el Guardían del Umbral produzca pánico y terror; es lo que se suele entender por una Consciencia sucia; pero la carta está escrita en oro, porque la Vida que ella contiene es la manifestación del Espíritu Celeste, representado por el diminuto sello y que no es otra cosa que la Chispa de Espíritu Divina. "Por éste Signo Vencerás", es su inscripción y esto nos demuestra y nos da la esperanza de la Eternidad. Recordemos que el Espíritu, a pesar de ser lo más diminuto e invisible del Ser Humano, contiene su eternidad e inmortalidad; sea como fuere y a pesar de las dificultades, nuestro Espíritu siempre vencerá y ese es el único y necesario fundamento donde se basa la verdadera Fe.


La Carta escrita con letras de oro sobre un fondo azul representa el poder del Espíritu y su esencia celestial; de otro modo, su procedencia del Pleroma, pues siempre el azul ha representado al Cielo por el mero hecho de que es algo que se encuentra por encima de nuestras cabezas y en aquella época solo era accesible a las más poderosas aves como las águilas, las ocas o los pelícanos.


El Poema no es otra cosa que la invitación al yo, representado por Christian Rosentkreutz, a su Iniciación. Recuerden que el Ángel llevaba muchas otras cartas para ser repartidas entre tantos otros yoes y que de todos ellos, solo uno podrá salir triunfante de las pruebas. Sabemos, de antemano, quien triunfará pues es el yo que nos cuenta la Historia de su Iniciación y de todo lo que observó, entre tanto, a su alrededor; siempre, siempre, recuerden esto, dentro del Microcósmos.


Christian Rosentkreutz ya se encuentra en una montaña, como el heremita que es, pero es instado por la misiva a dirigirse a otra Montaña y en donde se encuentran erigidos tres templos, el del Padre o del Espíritu, el del Hijo o del Cuerpo y el del Espíritu Santo o del Alma. Esa montaña de la que va a partir representa la parte más terrenal de la espiritualidad humana y que es el espacio donde rezamos, oramos y entramos en meditación; pero esta nueva Montaña está erigida en un lugar más alto. Es el Monte de la Trinidad y donde mora el Espíritu Santo, es la Shambala de los rosacruces y hasta ese lugar debe de dirigirse, para iniciarse, el Personaje narrador de las Bodas Químicas.


El Escrito no es otra cosa que la Voz del Espíritu de Christian Rosentkreutz, quien le avisa que sea prudente y que antes de dar un paso vigile el anterior. Que no sea impulsivo y se dirija hacia su iniciación sin encontrarse inmaculado tanto de obras como de pensamientos, porque de lo contrario, el proceso en lugar de ser constructivo sería destructivo y doloroso. Christian Rosentkreutz, tras leer el Mensaje de su Espíritu, conoce que se enfrenta ante algo tan maravilloso cómo puede ser la Vida Eterna o algo tan monstruoso como su desintegración como yo, para siempre.


Comprende por lo expuesto que su vida presente es la única que puede tener en cuenta; que debe de olvidarse de una segunda o tercera oportunidad. Lo que hizo, lo que hace y lo que haga en cada segundo de su Vida, debe de verlo como el último posible. Le están diciendo que su Presente, su instante inmediato, es lo único importante y que tal y como sea su comportamiento en ese segundo de su vida provocará su pase a la eternidad o su destrucción definitiva. Vemos, con claridad, que el escrito le está diciendo justo todo lo contrario a: "Sé positivo y no seas negativo, si no pasas ésta prueba tendrás otras oportunidades en ésta y otras vidas en el futuro". Creo que nuestro Lector lo entiende perfectamente y, de nuestra parte, sobra cualquier tipo de comentario al respecto.


También, al final del Poema se le solicita, con firmeza, que sea paciente y olvide cualquier conato de tener prisa. Si las prisas no son buenas, menos aún lo son para la Iniciación. Se le insta a que sea plenamente consciente de todos y cada uno de sus pensamientos y actos, a que no de puntada sin hilo pues cualquier error, por querer correr, puede suponer su derrota y fracaso; en definitiva, su extinción total y absoluta.


Por último, el divino Poema viene firmado por aquellos que invitan al yo Personalidad que ya conocemos como Christian Rosentkreutz. El Rey, "El Espíritu procedente del Pleroma" y la Reina "el Alma Eterna e Inmortal y consustancial con el Espíritu" Esta Entidad Divina bipolar ha invitado a sus llamados yoes, entre los que se encuentra nuestro Protagonista, para convertirse en el vehículo manifiesto y visible de su Divinidad y en eso consiste la Iniciación. El Símbolo de las firmas del Rey y la Reina no es otra cosa que la Mónada Hieroglífica y donde se observan esposados, el Sol, el Espíritu, y la Luna, el Alma que aunque posee la Luz del Espíritu no deja de ser una Luz reflejada, dado que la Luz del Espíritu es absolutamente destructiva dentro de nuestro Plano de existencia y es por ello que el Alma es la encargada de mostrárnosla; pero de forma indirecta mediante el reflejo de sus superficie.


En el fondo, el yo conoce lo que se le está pidiendo pues fue programado para este momento que se le presenta. El no es nada, solo un Egregor de su Alma Inmortal; pero entiende su gran responsabilidad, y el reto que supone enfrentarse a la Iniciación y de ello dependerá el que sea elegido o rechazado pues ya hemos visto lo que supone ésto para el yo. Es por dicha causa que el temor y el miedo traducido como el erizado del cabello y el sudor frío sea algo consustancial a la naturaleza emocional del yo, cuyo Plano de existencia más alto, durante su periodo de vida, es el Mundo del Deseo, también conocido como Astral y es un Mundo que por oscuro y desconocido produce terror y es donde mora la Sombra, nuestro Guardián del Umbral. En el fondo, todos somos humanos y el miedo es algo consustancial a nuestra Naturaleza.


Aralba Pensator Minister, Frater R+C