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martes, 13 de diciembre de 2011

KAOS QUÁNTICO, Libro III: Horizonte Quántico, Adiós neblinoso Gestar

De vez en cuando algún Avatar desciende al Mundo de las personas para recuperar a su otra parte, que también es un Arquetipo indestructible; pero aprovecha su estancia en los universos de la Materia para dejar su Luz. Luz que deberá ser seguida por los Despiertos. Aquellos cuyas consciencias les dictan que deben de abandonar el personaje, o los personajes que interpretan para convertirse en lo que serán eternamente: Hombres.

El Neblinoso Gestar (Crónicas)


(Dimensión– Alpha Omega)


El ANGEL GUARDIÁN Y EL ARBOL DEL CONOCIMIENTO


Adiós Neblinoso Gestar


–Pequeña Buscadora, hemos tenido que adelantar nuestro plan de intervención temporal; pero debéis tener cuidado de no daros a conocer antes de tiempo. También debéis tener presente una cosa: La unidad biológica “Humberto” deberá ser destruida, una vez que hayáis terminado con vuestro sagrado cometido.

–Pero ¿No hay algún modo para que preservemos su existencia? ¡Gran Consejo de Gestar!

–El mal está ya hecho, mis queridos Pequeña Buscadora. La información que hemos logrado introducir en su cerebro material está debidamente protegida por un ente vírico primordial; pero debéis saber que Humberto se extrañará de saber cosas que jamás ha estudiado y así dudará. Ser prudente, Laura, pequeña exploradora.

– ¿Nos denomináis en singular, Neblinoso Consejo?

–Te nombramos como a un individuo, Pequeña Buscadora, para que te vayas acostumbrando a, ésta, tu nueva situación.  Parte de ti, una parte muy importante de Pequeña Buscadora, permanecerá con nosotros; pero otra, al igual que sucede con los humanos, deberá aclimatarse a su Mundo y a sus modos y maneras de comportamiento. El futuro de la Inteligencia está en vuestras manos, Sonda Exploradora.

–Yo, Laura Estrella Luminosa estaré en permanente contacto con el Supremo Consejo...

–Eso no será posible, Pequeña Buscadora. Los instintos del simbionte femenino que has decidido utilizar irán adueñándose, paulatinamente, de tus sentimientos primero y de todo tu Ser después. Sabemos que tu misión “Salvaguardar la Inteligencia Estelar” es algo tremendamente peligroso pero necesario.

–Pero, pequeña Laura Estrella Luminosa. Haced vuestro trabajo conduciéndoos con paso firme y seguro; pero rápido. ¿Nos habéis escuchado?... ¡Rápido!, antes de que vuestra prestada personalidad biológica tome el control absoluto. Si esto sucediese, Pequeña Buscadora, os encontraréis perdida y olvidaréis vuestra consciencia de Gestar, como antaño sucediera con la Inteligencia Humana.

–Ya he tomado un cuerpo humanoide y, sin embargo, sigo pudiendo comunicarme con vosotros. Gran Consejo, no veo peligro alguno.

–Con estas últimas palabras, demuestras la confirmación de nuestro temor. Estás perdiendo la consciencia del peligro que te acecha. Pequeña nuestra, tu ya no posees un vínculo permanente con nosotros. Además, ese nexo de unión no desaparecerá de un modo repentino; si no que lo hará progresivamente. Si esa unión hubiese sido tan fuerte como cuando tú eras nosotros, serías consciente de lo que te decimos. Nosotros, por nuestra limitada omnipotencia, lo hemos sentido en presente; pero ese celestial poder ya no te acompaña. Permanecerás bajo nuestra protección por un cierto tiempo, mientras podamos sujetarte; pero después quedarás a merced de los vaivenes producidos por los pliegues del discontinuo espacio temporal y en el que ahora mismo os encontráis.

– ¿Que deberé realizar para poder regresar al Neblinoso Gestar?

– ¿Os dais cuenta, querida niña? el tiempo ha empezado a correr para ti. Hace uno de tus instantes, sabías cual era el único medio para poder regresar y sin embargo, ahora no eres capaz de recordarlo. Lo que ahora os digamos, Pequeña Laura, ya no tiene importancia pues, indefectiblemente, llegaréis a olvidarlo.

–Entonces ¿Cómo podré saber cual es la misión que tendré que realizar, cuando deberé de actuar y...?

–Vosotros, Pequeña Buscadora. Nosotros el Soberano y Supremo Consejo de Gestar, donde el éxtasis radica, al igual que hicimos con el Capitán Humberto Romero, hemos hecho con Laura Estrella Luminosa. En su debido momento sabrás lo que tendrás que hacer para llevar a buen término nuestra sagrada misión.

–Entonces. ...Bueno, yo. ...¿Seré una simple humana?

–No, querida Laura, sin embargo casi, casi... Seréis una especie de Avatar, Profeta o Mensajero para vuestro amado Humberto. En todo instante seréis consciente de que es vuestro protegido y que hasta la vida deberéis de dar por su persona; al menos, mientras no se haya cumplido fielmente el objetivo.  Después...

–Deberá morir ¿Verdad?

–Contemplamos como la humanidad de vuestro simbionte biológico va tomando fuerza sobre vuestra Entidad Original.  Efectivamente, tendréis que transitarlo por su propio bien, por tu propia seguridad y porque es absolutamente necesario, tanto para la humanidad como para tu hogar, el Neblinoso Gestar. Deberás luchar contra los sentimientos humanos.

–Entiendo con eso, Sagrado Consejo, que ¿solo con la inmolación podré regresar indemne a vuestro lado? 

–Lo habéis comprendido perfectamente, Laura Estrella Luminosa. Tan sólo lo que los humanos denominan erróneamente como muerte es capaz de liberar al Espíritu que mora en sus órganos mortales; pero sólo una muerte querida y consciente sirve como puente o transición hacia la Morada perdida. La vejez de la materia suele destruir, en muchos casos. el vínculo que nos une. Los accidentes, del mismo modo, impiden que el Ser pueda viajar más allá de los pozos gravito cuánticos producidos por los pliegues del espaciotiempo. Una de las frases favoritas de los místicos humanos decía que tan sólo los valientes podrán tomar el Mundo Original por asalto. Sólo la muerte en contienda, o la auto inmolación podrá traeros de vuelta al Continuo Atemporal de Gestar.

–Pero... ¿El asesinato?

–Humberto Romero deberá luchar contra ti y tú deberás traerlo con nosotros. Conocemos perfectamente a la raza humana y tu Capitán no es de los que se suicidan. Podríamos haberle implantado dicha orden en su cerebro; pero tan sólo habría servido para inutilizar la herramienta que en estos momentos nos es tan necesaria. Laura, de haber actuado así, tu Amor,  enloquecido, se habría vuelto inservible para poder continuar en su presente vida. Esa extraña orden, no podría vibrar en resonancia con su programa genético original y entraría en un bucle de prioridades donde éstas se anularían entre sí. No existe otra solución, Pequeña Buscadora, Tendrás que interrumpir su lazo de unión con la Vida Espaciotemporal.  cuando llegue el mommmeeennntttoooo; miennnttrraaassss taaannnnttoooo. debbbeeerraaaassss pprrrooooteeegeeerleee.

–Os oigo lejanos. ...¡entonces le perderé?

–Eso, Pequeña Laura, sólo depende de vosotros dooossss…

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